lunes, junio 09, 2008

Semillas

El botánico miró hacía sus discípulos, eran cinco chavales de clase noble que habían decidido ser eruditos.

- Muy bien, cómo ya sabrán, las plantas son capaces de sobrevivir en climas extremos, en mitad del desierto con una tromba de agua surgen las plantas. ¿Quién me dice el por qué?

- Por el estado de letargo.

- Muy bien, discípulo Torgen, es estado de quiescencia de las semillas les permite estar grandes periodos de tiempo inactivas y...

La mente de Mist desactivó de la clase, se pusó a observar cualquier cosa que no fueran los dioramas de semillas en la pizarra. La clase duró 2 eternas horas...


Al salir hacía calor, se acercaba el estío, y él no había acabado el dichoso herbario que le daría un aprobado casi seguro. Decidió que iría a un bosque cercano a recoger algunas, de paso cogería muestras de semillas aladas, que peñazo.

Cogió a "Koala", su caballo, y cabalgó durante una hora alejándose del campus; a la sombra de los árboles se estaba mejor e incluso se permitió unos minutos de descanso al pie de uno de ellos, luego comenzó con la monótona tarea de recoger plantas y semillas; en esto estaba cuando la vio.
Se trataba de una joven con la que había estado saliendo antes de entrar en la academia, la daba por casada con un noble de las llanuras de Castilia.

- Ey... - ella se giró al oirle -¿qué tal? ¿cómo tú por aquí?
- Hola, ¿tengo que llamarte ya maestro?
- No, para nada, sigo siendo discípulo
- Ah, pues nada vengo aquí a una cena, mi esposo no puede acudir así que vengo yo en su nombre.
- ¿te apetece un paseo mientras recojo muestras para un trabajo?
- No estaría mal, asi hablamos de lo nos ha acaecido en el tiempo que llevas desaparecido.

Pasearon y hablaron por horas, de lo pasado cuando se conocieron, de lo que vino después; ambos se negaban a hablar de un futuro, pasó el tiempo y llegó el momento de volver al campus.

- Vendrás a la cena.
- No sé si tenemos permitido asistir.
- Entonces ya nos veremos.
- De acuerdo Lady Winter.

"La Dama Invierno" pensó al volver a su cuarto, apropiado nombre, no había reaccionado de ninguna manera a la chispa que antes existía. No se había inmutado y casi que había cambiado el tema. Pasó parte de la noche clasficando las plantas y semillas y así dejar el trabajo hecho... pero ella no salía de su cabeza.

No sintió como se acercaba, no sintió como se paraba detrás de él, ni como le acarició el pelo; Mist había sucumbido al sueño y dormía encima de una muestra de flores amarillas. Sin embargo un beso en la mejilla le hizo abrir los ojos, al hacerlo creyó ver un ángel, un ángel sin túnica ni nada que cubriera su belleza.

Al día siguiente su mente ni siquiera intentó concentrarse en la clase, la dejo vagar de una idea a otra, de un deseo a caer en la realidad, de creer que todo sería posible a sorprenderse por pensar eso... y entonces comprendió que pasaba. Una semilla había sido plantada hacía tiempo, él que creyó haber matado a la planta en el momento que dejó de verla, se había olvidado de recoger las semillas que de la relación surgieron, esas semillas habían aguardado quiescentes y no habían necesitado la noche para germinar, tan sólo unas palabras de ella al día anterior...

Fue cuando descubrió que jamás se libraría de ese amor, que nunca podría dejarla marchar para siempre, que nunca se libraría de las semillas que habitaban en su interior.


P.S: Hoy tengo el día raro, motivos: Examen mañana (YUJU HORMONAS), muchas cosas por hacer y algo q no m esperaba y q posiblemente haga este verano, achacad a ese conjunto de cosas la rareza de la historia.

Hala a cuidarse

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Una vez hubo planta, raiz, ramas, flores y , consecuentemente, semillas... que van a durar para siempre, porque formas parte importante de mi corazón y siempre vas a recibir un 'te quiero' por respuesta, xiqui...


el fantasmagórico ser que disfrutará de tu compañia este verano :D

Anónimo dijo...

Ay mariconson, no te gusta na la canne con tomate!
Algun dia saldre en este blog!algun dia!!!

Thorfinn